Fue un encuentro de a tres. Una cita de risas y juegos en la que Milan Piqué se robó todas las miradas. Shakira (37), acompañada de su suegra Montserrat Bernabéu, llevó a su pequeño al parque Tibidabo Amusement para que disfrutara de los juegos.
Recién llegados de Las Vegas –donde la cantante estuvo presente en la 49ª entrega de los Premios Academy de música country–, madre e hijo aprovecharon el sol de la primavera y "domaron" dos caballitos blancos en el carrusel. Ya nadie se sorprende de ver a la diosa colombiana por las calles de la ciudad paseando con Milan, ya que cuando está en Barcelona y su agenda se lo permite, lo lleva a todas partes con ella. También, y pese a que su pediatra le recomendó que no lo hiciera debido a que podría modificar su reloj biológico, Shakira hace largos viajes en avión con su hijo porque no se separa nunca de él. Además, quiere que tenga muy presente sus raíces latinas y no pierde oportunidad para visitar a sus padres en Barranquilla varias veces al año.
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